La cooperativa onubense, radicada en Moguer, combina la mejora constante de la calidad de su producción de berries con el cuidado del medio ambiente, la eficiencia energética y la responsabilidad social y laboral.

La cooperativa española Agromolinillo, con sede en Moguer (Andalucía), dedica su actividad a producir arándanos, fresas, frambuesas, moras y cítricos de calidad superior, con unos estándares que le permiten comercializar su fruta a mercados de todo el mundo y fidelizar su relación con los distribuidores más exigentes. Pero su dedicación al perfeccionamiento de su producción frutícola y la consolidación de los mercados a los que exporta no merma sus esfuerzos por alcanzar la excelencia empresarial, algo que se ha convertido en objetivo primordial para la compañía y que, en buena parte, es razón para que los distribuidores internacionales se decanten por la oferta de Agromolinillo.

Así, a la investigación y aplicación constante de nuevas técnicas de I+D+i, de las que derivan la implantación de variedades más resistentes, nutritivas y atractivas por su color, tamaño y sabor, se une el esfuerzo que dedica la empresa en cuestiones como el uso eficiente de los recursos y el cuidado del medio ambiente. Desde hace años, Agromolinillo, que desarrolla su actividad en un entorno natural sensible y privilegiado, cuida cada gota de agua que utiliza en el riego de sus campos gracias a una potente inversión en sistemas de riego ultra eficientes, pero además, es puntera en el control del uso de la energía mediante la adopción de medidas de ahorro y de la formación constante de su personal en esta materia.

Igualmente, es consciente de que una empresa es el producto de la suma de todos y cada uno de sus trabajadores, y que la protección de todos ellos es primordial para el buen funcionamiento y la satisfacción de todo el equipo. Por ello, Agromolinillo dedica sus esfuerzos a perfeccionar las herramientas de prevención de riesgos laborales con la creación de un departamento propio especializado en esta materia, con lo que la atención a su personal es directa y constante.

Un personal que se siente cada día partícipe del devenir de la compañía, que participa en las decisiones y que aporta, en las reuniones de equipo que se celebran periódicamente, sus ideas e inquietudes, logrando una cohesión que, lógicamente, se transmite a los excelentes productos que avalan la reputación de Agromolinillo.

Agromolinillo, que forma parte del Patronato de la Fundación Dieta Mediterránea, destina grandes recursos en materia de comunicación a concienciar de la importancia de promover el modelo agroalimentario que define a la Dieta Mediterránea que no es otro que sinónimo de mejores hábitos de vida saludable, calidad de vida y prevención de enfermedades degenerativas.